Nuevo formato de esta bonita carrera en Alcázar, subiendo a los 15 km. No estaba en mi plan, pero el amigo Fran me propuso acompañarle y no he podido negarme, aunque mi estado de forma deja mucho que desear...llevo muchas semanas con sóleos y gemelos castigados. Por si acaso, correré con medias de compresión.
Vamos un buen grupo del C.A. Las Lagunas, no es para menos, tan cerca de casa hay que aprovechar la oportunidad y, estando en el circuito de Ciudad Real, el buen ambiente y la impecable organización están asegurados.
Como digo al principio, han pasado de su distancia de 10 km a los 15. Ahora se recorre un poco más las calles de Alcázar y se conserva la parte externa, San Isidro y los molinos. ¿Se nos atragantarán esos 5 km extra? Vamos a verlo:
Cafetito en el bar del cuñado, temprano el dorsal recogido, uniforme puesto y foto de grupo, todos contentos.
No tardamos en pillar al grupo de Casero, Bienve y Velasco. También van Teo y Elena, aunque no me doy cuenta de ellos. Llegamos al hospital y bajamos por los carriles de la izquierda. Aquí encuentro al compañero Alfonso, me da recuerdos para mi hermano, ahí los tienes Antonio jeje. Llegamos a la rotonda del mercado y subimos por la Avenida de Herencia.
Vamos poco a poco subiendo el ritmo y adelantando corredores. Le digo a Fran que debe llevar siempre buenas sensaciones, nada de ir "justitos". Si en algún momento me adelanto, debe ser paciente, ya que iré muy atento y reduciré hasta que volvamos a ir juntos. Adelantamos al práctico de la hora y cuarto justo cuando había planeado, buena señal.
Plaza de España, o la del Quijote, como también la conocemos:
Todavía llevamos buena cara.
Nos metemos en la ciudad, dirección al barrio del Porvenir y San Isidro. Van pasando los metros y el ritmo, fácil para lo que yo estoy acostumbrado, no termina de calentar mi cuerpo. En realidad, llevo algo de frío. Por suerte, la suave brisa que hoy nos acompaña, va dando de espaldas, así se lleva mejor.
Después de cruzar el túnel de la vía del tren, nos metemos en zona rural. Menos mal que los caminos están en bastante buen estado, teniendo en cuenta lo que ha llovido los días de atrás (no quería llegar con las zapatillas llenas de barro). En esta parte hay mucho sube-baja. No son pendientes pronunciadas, pero te van quemando si el ritmo no es el adecuado. En una de estas subidas, que se empieza a hacer larga, ya que Fran se va quedando un poco, veo que el práctico de la hora y cuarto va muy cerca de nosotros. No hay problema, había planeado que nos adelantase en la subida a los molinos, para, luego nosotros, tratar de volver a pillarlo antes de meta.
Poco antes de llegar al asfalto del cerro de San Antón, veo justo delante de nosotros a Albertuki, Javi Carrillo y JC Monreal. Llevan un ritmo muy parecido al nuestro. Estaría bien hacer el resto de la carrera juntos, a ver lo que dicen las piernas de Fran...
Comienza la subida. Me freno bastante y justo nos adelanta el grupo de la hora y cuarto. Fran comienza a resoplar. Yo voy muy lento, corriendo de puntillas. También se van hacia delante Carrillo y Monreal. Mi compañero se pone a andar y me dice que lo deje ahí. ¿Pero como voy a hacer eso, hombre? Salimos juntos y llegamos juntos, ese es el trato. En una de las partes más duras, nos adelanta Bienve, va tan feliz, en su entorno.
Tengo otra foto de mi compañero, pero mejor no la pongo, menuda cara lleva ya el pobre jeje. En la parte más alta trato de darle ánimos, diciéndole que ya está hecho lo peor. Pero la realidad es que, la bajada, al ser también muy inclinada, nos hará sufrir de nuevo.
Efectivamente, el ir frenando la gravedad, también pasa factura. Aquí nos adelantan Casero y Velasco como auténticos cohetes (ya no los volveremos a ver, quiero decir, en la carrera, por supuesto). Fin del asfalto y a la vista el puente de la vía del tren, que esta vez hay que cruzar por arriba. Otra cuesta.
En cuanto llegamos de nuevo a población, trato de poner el ritmo que habíamos pactado (sobre 4'50'' el km) y le pregunto a mi compañero si podrá aguantar así hasta meta. Un tímido "creo que si" sale de sus entrañas, pero no lo veo del todo claro, lo ha pasado mal en la subida.
El resto de carrera es ir bajando suavemente. Yo voy de lujo, apenas he sudado y todavía llevo algo de frío. Voy buscando las partes de las calles en las que da el sol. A poco menos de un kilómetro de meta, Fran se pone a acelerar. Le digo que se retenga un poco, ya hemos hecho todo el trabajo y un esfuerzo de ese tipo al final, no nos va a aportar una gran mejora en la marca final, pero, sin embargo, puede desembocar en una lesión, al llevar ya la musculatura muy castigada.
En un punto de los últimos kilómetros está Uti, que ha venido de palmero y fotógrafo. No ha podido correr. A ver si recuperas pronto amigo!!
Disfrutamos pues, lo poco que queda, sin castigarnos en exceso.
El resultado final es un minuto más lento del mínimo que buscábamos, pero nos damos por satisfechos, dado el perfil de la prueba.
No quiero terminar el relato sin antes agradecer a la señora de la foto el codazo que me dio para adelantarnos al sprint en la misma meta y así ganar dos puestos (en la mitad de la clasificación). Ni siquiera se disculpó... en fin, olvidada queda.
Además de la bolsa del corredor, nos reciben con un avituallamiento final, agua, isotónicos, fruta... y un ticket para canjear por otra bebida, un bocata y una pulga de salchichas con tomate. Vamos, que, si te pones, llegas comido a casa.
Los compañeros del C.A. Las Lagunas en su línea, todos contentos y con las marcas que esperaban conseguir.
Ya estoy preparando la próxima carrera. Si no pasa nada, será un 10 k en Madrid, con un equipo de compañeros del trabajo. Espero llegar en buena forma!!