lunes, 24 de octubre de 2011

Nada mejor que la lluvia ...

... para acordarte que tienes la bici rota y es el momento ideal para llevarla al taller.
Sin duda, ha sido un acierto llevarme la rueda trasera de la MTB esta mañana al taller de bicis donde la compré "Repabike", en Alcázar. Mientras Marisa hacía la compra me he acercado con la susodicha para que me apañaran el 'estropicio' que hice con los piñones (no enganchaban, iban sueltos en los dos sentidos, bruto que es uno). Nada más verla el mecánico me ha diagnosticado 'piña nueva', incluso el precio, montaje incluido. En una hora estaba lista. Al ir a recogerla me pregunta cuantos kms tiene la cadena ... ups, unos 3000 le contesto; entonces deberías cambiarla; si, pero aquí no tengo la bici, está en casa; vale, pues te la llevas y la cambias tu ... jejeje ... que cambie yo la cadena ... jajajaja. Venga hombre, la idea no es tan descabellada, tienes tronchacadenas y eres mañoso, al menos inténtalo; vale, pero si no atino te la traigo; ok.
Me pongo manos a la obra y ops! sorpresa! el tronchacadenas (todavía sin estrenar) está roto, bien! (mier...) Menos mal que al ir a recoger a Roberto al cole un vecino me dice que me presta el suyo ¡encantado, esta misma tarde la monto!.
Vuelvo a mi taller particular, quito la cadena vieja, saco la nueva de su cajita, le corto los eslabones que sobran, la monto en la bici y ¡¡voilá!! ha sido facilísimo. Claro que, no es oro todo lo que reluce ... cuando voy a poner la rueda me doy cuenta de mi soberana torpeza, no he metido la cadena a través del cuadro, vamos, que me he conformado con montarla, pero sin mirar cómo lo hacía ... que espabilao!!
Menos mal que en mi flamante tronchacadenas (todavía sin estrenar, ja) tenía un eslabón de repuesto y en pocos minutos la proeza estaba lista; esta vez si, la he ... metido ... por el sitio correcto ;-)
Ahora solo toca tener tiempo para disfrutarla.