martes, 26 de marzo de 2019

XII Carrera popular Capitán Duque, Valdemoro 24 de marzo de 2019

Primera competición seria después de no haber podido participar en el maratón de Sevilla. El mismo día también se celebraban la media de Bolaños y la Media y 10K de Toledo. Una lástima, ya que también me habría gustado hacer la media de Toledo.
Me he sometido a una buena carga de kilómetros. La idea es coger un buen estado de forma y después de Valdemoro, levantar un poco el pie del acelerador; aunque ya me he inscrito a la del Porvenir, en Alcázar... uf, me puede el vicio...
En fin, que al Colegio de Guardias me acompañaron mi cuñado Rubén, y varios compañeros de Villacañas y Lillo: Miguel Angel, Luismi, Martín y Oscar.
Nos ponemos a calentar y al rato anuncian por megafonía que la carrera se retrasa 30 minutos; hay mucha gente todavía recogiendo los dorsales. Pues nada, paramos y nos relajamos. Poco después nos dicen que en 5 minutos salimos... una pena, corriendo al coche para dejar el cortavientos y enseguida a pillar un buen sitio en la pista de atletismo junto a Rubén y Miguel A. Tras las fotos y discurso de rigor, el Capitán Duque nos da la salida. Enseguida me tiro al lado izquierdo de la pista y me pongo al ritmo previsto para el primer kilómetro (si, he estudiado el perfil y lo llevo así de controlado jajaja).
Todavía dentro del colegio está puesta la señal del "1", paso por debajo de 4', pero el reloj pita unos metros más adelante. Al haber cogido un buen lugar en la salida, apenas llevo gente delante, calculo que unos 50 corredores, así que no voy a ir agobiado en ningún momento de la carrera y, teniendo en cuenta que hace dos años acabé en el puesto 33, seguramente habrá pocos que me adelanten este domingo.
El km dos es en ligero ascenso. Yo había calculado subir a 4'10" como muy lento, pero cada vez que miro el reloj veo 3'55". Antes de la marca del "2" se asciende un poco más y me freno, para pasarlo en 4'02". Desde aquí se empieza a ascender un poco más, llevamos un kilómetro de recta y queda otro hasta que la carrera gire en una rotonda y empecemos la bajada. Me lo tomo con algo más de calma y me freno para bajar a 4'10".
El gps cada vez me pita más lejos de las marcas de la organización, así que decido no hacerle mucho caso. Le echo un vistazo rápido al pulso y ... sorpresa!! 172 ppm!! a este ritmo peto seguro, pero las sensaciones son buenas, ya llevo 3 km empiezo a bajar y las piernas me piden alegría.
Asi que nada, a acelerar se ha dicho. Ahora voy haciendo caso a mis piernas, a mi respiración, al estómago (si este último duele, mala señal).
Giros, ascensos, bajadas rápidas, avituallamiento cerca de una rotonda (toca beber dos tragos largos y girar para, de nuevo subir ...
El caso es que desde que pasé el km 6, y hasta llegar al km 9, todo es la misma historia, subir, bajar, girar. En ese punto, el 6, eché un vistazo al tiempo, 24'00". Con la absoluta confianza en mis fuerzas y creyendo que apenas quedaban ya repechos, pensé que había posibilidades de bajar de la barrera de los 40' en meta. Pero, ay amigo, en Valdemoro no salen así las cuentas. Si vas al límite, las posibilidades son de acabar fundido y con unos segundos extra de regalo.
Desde el km 7 fui junto a un corredor local. Pensaba que conocería bien el recorrido y adaptaría el ritmo a las cuestecillas, pero cada vez que comenzábamos a subir yo me quedaba atrás. Luego me costaba volver a darle alcance, pero podía gestionar bien el esfuerzo.
Sobre el km 8 adelantamos a un corredor veterano que me había sobrepasado bastante antes con mucha solvencia. El pobre iba jadeando bastante. Tentado estuve de decirle que se frenara un poco a recuperar el aliento...
Comienza el km 9. Solo queda una subida y ahora me parece que no es tan dura. Mi acompañante acelera, me cuesta seguirlo y cuando me quedo detrás me grita unas palabras de ánimo. Doy un achuchón y me pongo a su lado. Entramos al Colegio y alcanzamos a otro corredor con una camiseta que ponía "bomberos". Voy muy justito de fuerzas. El de Valdemoro y el bombero se ponen a la par y yo me quedo detrás. Durante muchos metros he ido a rebufo del corredor local y ahora me sabe mal esprintar para adelantar dos puestos que no me van a llevar a ningún sitio. Miro el crono cuando calculo que me quedará un minuto para llegar a meta: 39'50" ... mier... se me va a escapar de lejos el sub 40'...
Al final acabo en 40'40", repitiendo el 33º puesto de la general. Aunque no he logrado el objetivo, estoy contento con mi rendimiento, teniendo en cuenta la cantidad de subibajas que he tenido que solventar.
El resto de la comitiva va llegando poco a poco. Miguel A. es el primero en seguirme, va progresando bastante y pronto me echará la pierna encima jeje. Luego Rubén, Oscar, Martín y Luismi.
En el viaje de vuelta tuvimos que parar en un bar a reponer líquidos, cosa muy importante. Y por supuesto, siempre debe hacerse con zumo (de cebada, claro).