La excepción de ayer estuvo mejor de lo que creí en un primer momento; tanto que esta mañana he preferido quedarme en casita y dejar el entrenamiento para la tarde. Hay que repetir, sigo disfrutando muchísimo con la bici de montaña.
Conforme va pasando el día percibo una extraña sensación, algo así como que el entrenamiento de la tarde me va a sentar mal, incluso que debería descansar. Para comer hay hidratos en abundancia: cocido. La experiencia me dice que si salgo a correr lo voy a pasar mal, pero el solecito y las ganas de salir me pueden y poco después de las 17:00 ya estoy en marcha.
Los primeros kms voy rondando los 5' "pelaos", luego acelero ligeramente y del cocido ya ni me acuerdo. Las sensaciones son inmejorables, 145 pulsaciones y de ahí no paso. Pues nada, hoy hago una salida más larguita que lo de costumbre. Subo a la casilla de Santiaguillo, y en lugar de regresar a casa para completar 14 kms decido rodear las lagunas. Cuando llevo 52 minutos se me acaba la batería del mp3 ... llego al silo del tío Pedro, aquí hay algunas cuestas y me pongo a poco más de 150 pulsaciones. Regreso a terreno llano y vuelven a bajar, incluso menos de 145 al pasar por la ermita de San Cristóbal.
De respiración voy genial, de piernas, mejor, hoy estoy disfrutando como pocos días. El ritmo ha bajado algo, pero es lo que debo hacer, nada de acelerones. Enfilo el paseo final hacia casita y mantengo la velocidad, controla tío, controla.
Tan solo el último km lo hago ligeramente más rápido (pero poco), acabando los 17'5 kms en 1:25:30. Me doy por satisfecho, mañana más.
2 comentarios:
Pues a ver yo como responde el cuerpo hoy y en el duatlón de mañana, que en los últimos tres dias no he podido hacer nada de nada.
Mildo:
Hoy: suave
Mañana: a toa pastilla!!
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